mensaje a Ávila Olmeda

Carlos Lazcano 
carloslascano@hotmail.com

Me dio tristeza ver que la gobernadora, Marina del Pilar Ávila Olmedo, dio el banderazo de salida de la carrera Baja 1000. Una mala señal para los quienes estamos preocupados por el cuidado de nuestras áreas naturales, ya que, si en algo se distingue tal carrera, es por el impacto negativo que ocasiona sobre los desiertos y los pésimos mensajes que da a la juventud, haciéndoles creer que es más importante un vehículo que nuestra biodiversidad. La carrera también favorece en gran medida el colonialismo cultural que se padece y que en los últimos años se ha incrementado notablemente, sobre todo por el hecho de que la historia regional dejó de enseñarse en la educación primaria, secundaria y preparatoria.

RESULTADOS INSUFICIENTES
Recién pasó la famosa COP 26, reunión convocada por la Organización Nacional de las Naciones Unidas (ONU) para lograr acuerdos importantes que frenen la afectación grave que se comete contra el ambiente natural que sustenta a la humanidad. La lucha es contra el calentamiento global y el cambio climático y más concretamente se están buscando el poder realizar acciones a nivel mundial que puedan contener el que la temperatura media de la tierra supere los 1.5 grados que está por aumentar. Los resultados de esta reunión son a todas luces insuficientes y muchos aspectos siguen sin ser resueltos, notándose la falta de compromisos más fuertes para lograr esto. Y es que existen intereses a los que les preocupa más ganar dinero, aunque se pierda toda la naturaleza que sustenta a la humanidad, lo que finalmente para ellos será negocio.

LLAMADO URGENTE
Todas las carreras fuera de camino le apuestan a esto: a la destrucción de las áreas naturales, por lo mismo a legarnos un ambiente natural insustentable, al calentamiento global, al cambio climático, y a la destrucción de la biodiversidad.

Estamos dejando de escuchar el clamor que hay en todo el mundo de frenar la actitud suicida que está tomando la humanidad. Hace poco un grupo de jóvenes ensenadenses pidió un amparo contra el gobierno por dejar de cumplir sus obligaciones en cuanto procurar un ambiente natural sano, derecho que tienen todos los mexicanos por ley, ya que se encuentra en nuestra constitución. Las carreras Baja 1000 y Baja 500 atentan contra ese derecho, al igual que todas las carreras fuera de camino.

¿Se ha puesto a pensar la gobernadora en su hijo que está por nacer? ¿ha visto el futuro que le espera si en estos tiempos no se hace algo por cuidar de manera efectiva el ambiente natural? La gobernadora se encuentra en una posición privilegiada a través de la cual puede hacer algo por apoyar los esfuerzos conservacionistas, si lo hace estará heredando, no solo a su hijo, sino a toda la niñez y juventud, una mejor tierra. Si no lo hace y apoya los proyectos depredadores como la Baja 1000 y la Baja 500, entre muchos otros, podría, en el futuro, recibir el reclamo de su hijo por no hacer algo que es urgente para Baja California y la humanidad. Le estaría heredando a su hijo, y todos los niños u jóvenes de hoy una tierra devastada y una Baja California destruida.

INTERESES OSCUROS
Ojalá y la gobernadora no se deje llevar por eso de que dichas carreras dejan una "derrama económica". Si el desastre alcanza a la entidad se dará cuenta de que el agua y un aire limpio valen más que el oro y que el dinero no se puede comer. No le pido que las quite, pero sí que las obligue a que sean respetuosas de los ordenamientos y de las leyes ambientales, ya que hasta la fecha se han burlado de ellas, incluyendo a las autoridades. Hay muchos que justifican dichas carreras, y el hecho de que violan las leyes y se burlan de ellas, por esa supuesta derrama económica, si esto así fuera serían personas que justificarían a los narcos, la prostitución, la trata de blancas y tantos otros grandes negocios que degradan a la humanidad. Y desde luego, al continuar haciendo sus eventos depredadores (las baja’s) y no respetar leyes ni ordenamientos lo menos que se puede pensar es la existencia de alianzas entre organizadores y ciertos funcionarios.

Respaldar eventos que tanto dañan, degradan y afectan es ciertamente un mal principio de un gobierno del que se espera mejore las cosas en Baja California. El estado es una tierra que necesita ser amada y las mencionadas carreras le apuestan a lo contrario. No sólo es la depredación natural, igualmente está el hecho de que una sola persona se enriquece a costa de las regiones naturales y la famosa “derrama económica” son sólo migajas de los grandes intereses que se mueven, de los cuales casi nada de dinero llega aquí.

DEPREDADORES DE LA IDENTIDAD
También está la afectación que ocasionan a la verdadera identidad, al promover el término “Baja”, en contra del verdadero nombre que es California, nombre que esos intereses desean quitar. De hecho, desean arrebatar toda la identidad a los habitantes, convirtiéndolos en un objeto de folclor mediocre, en donde se alaba y celebra como dioses a extranjeros depredadores.

Ojalá la gobernadora ayudara para que los jóvenes bajacalifornianos amen más la maravillosa biodiversidad con todo su hermosísimo entorno natural, el cual una serie de vehículos, máquinas depredadoras, que sólo envenenan y destruyen los ambientes. Que sus héroes sean los científicos e investigadores que tanto ayudan, a una serie de personajes, en su mayoría extranjeros, que nada positivo dejan y que su única “virtud” es ir lo más rápido posible aplastando todo lo que tengan que aplastar, incluyendo personas.

 
También está la afectación que ocasionan a la verdadera identidad, al promover el término “Baja”, en contra del verdadero nombre que es California. De hecho, desean arrebatar toda la identidad a los habitantes, convirtiéndolos en un objeto de folclor mediocre, en donde se alaba y celebra como dioses a extranjeros depredadores.