Piden respetar focas de la Bahía Todos Santos

Benjamín Pacheco/EL VIGÍA
bpacheco@elvigia.net | Ensenada, B. C. 

En el Estero de Punta Banda existe una colonia reproductora con más de 30 individuos de la foca común, especie a la que se le considera un buen indicador de las alteraciones del ecosistema, como los distintos tipos de contaminación y el disturbio a causa de un turismo mal regulado. 
La bióloga Liliana Ortiz Serrato, de la asociación civil Pro Esteros, señaló a El Vigía que debido a estas características, es importante no alterarlas en caso de encontrar algún ejemplar de las también llamadas focas del puerto. 
“Son pocas las veces que la han visto en el puerto o las costas de nuestra ciudad. Sin embargo, también es poco conocido que en el Estero de Punta Banda tenemos una colonia reproductora con más de 30 individuos, quienes utilizan la barra arenosa para descansar y tener a sus crías”, comentó además de compartir fotos de su autoría y otras de José María González, que reflejan dicho entorno.
Dentro de las aguas pueden encontrar su alimento principal que son los peces, prosiguió, además de que la dieta de estos animales incluye moluscos y crustáceos, aunque también puede optar por consumir calamares. 
“La foca común es un mamífero marino redondeado que se diferencia de los lobos marinos por su pelaje, el cual generalmente tiene dos diferentes tonalidades: algunas focas son blancas o gris claro llegando hasta un color plateado, presentando manchas negras. Otras son negras o gris oscuro a pardo con manchas circulares blancas”, detalló Ortiz Serrato. 
La bióloga explicó que, a diferencia de los lobos marinos, las focas tienen las aletas delanteras más cortas y no presentan orejas, sino que solo tienen un orificio auricular. 
Agregó que este mamífero marino se distribuye en el hemisferio norte de los dos grandes océanos, tanto en el Pacífico y como el Atlántico, excepto en las zonas congeladas, como los polos. 

Indefensas ante cambios
Las focas son muy propensas a ser afectados por la contaminación urbana e industrial, advirtió, así como el disturbio causado por el turismo mal regulado como las motos acuáticas o lanchas que pasean por los sitios de descanso que pueden colisionar con los individuos que se están alimentando. 
“Tanto que se les considera como buenos indicadores biológicos de las alteraciones de ecosistema”, afirmó la también encargada del área de comunicación social de Pro Esteros. 
Ortiz Serrato recordó que la foca es muy sensible durante la temporada reproductora, por lo que incluso pueden dejar solas a sus crías en caso de que las personas se acerquen a su hábitat.
“Poniéndolas en riesgo de los depredadores, el calor o frío extremo, y en los peores casos pueden llegar a abandonarlas, destinándolas a la muerte. Es por esto que, si ven una colonia de estos mamíferos, lo mejor es no acercarse y retirarse del sitio, evitando así el disturbio hacia esta especie”, remarcó. 
La bióloga agregó que otra acción importante es evitar la basura en las playas visitadas, ya que los desechos plásticos son el principal contaminante de los mares y las especies silvestres son las más afectadas.