Llama Valdez Torres a vivir en amor a Dios

KARLA PADILLA/EL VIGÍA
kpadilla@elvigia.net | Ensenada, B. C.

“Ser un buen discípulo es tener la certeza de tener a Dios en nuestra vida, no se es un buen cristiano por aprenderse rezos o saberse la palabra, sino por ser capaz de sentirse feliz por tener a Jesús en el corazón”, expresó Rafael Valdez Torres, obispo de la Diócesis de Ensenada.

Durante la homilía del domingo, recordó que donde hay amor, está Dios, y donde está Él no falta nada, por lo que reconocerlo libera, salva y da la sensación de que nada falta en la vida.

“A veces nosotros nos contentamos con aprender una oración, una fórmula, con leer un pasaje de la escritura, pero nos hace falta dar ese paso de la vida, de la liberación, reconocer la autoridad de nuestro Señor Jesucristo que me perdona”, señaló.

Relación filial
Monseñor indicó que en la familia se debe transmitir la felicidad que se siente al considerarse hijos de Dios y no solo educar en lo intelectual, que si bien es importante, lo fundamental es que los padres de familia transmitan a sus hijos que son felices por tener a Jesús.

La vida cristiana, dijo, exige un comportamiento perseverante, una relación filial con Dios y una escucha de la palabra de Jesús, así como gestos y actitudes que permiten transmitir la experiencia del amor al padre.

“Tratemos de entender que la autoridad no es autoritarismo, es servicio, es amor, es entrega, es generosidad… y es la invitación para nosotros, nuestras actitudes deben decir lo que profesamos, nuestros gestos y acciones deben manifestar nuestra fe, nuestras palabras deben ser firmadas con nuestros gestos y nuestro comportamiento”, concluyó.