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Compartir sin egoísmo sería solución a muchos problemas: dice obispo
KARLA PADILLA/EL VIGÍA
kpadilla@elvigia.net | Ensenada, B. C.
Compartir, sin egoísmo, es el camino de solución a muchos problemas pastorales, sociales y del mundo actual, señaló Rafael Valdez Torres, obispo de la Diócesis de Ensenada, durante su mensaje dominical difundido a través de las redes sociales del decanato.
Recordó el milagro de la multiplicación de cinco panes y dos peces que fueron compartidos por un joven y que alcanzó para alimentar a una multitud de cerca de 5 mil personas que seguía a Jesús.
“El milagro comenzó a realizarse cuando el muchacho cedió sus panes al maestro con el fin de darle de comer a la multitud, debemos comprender que para ayudar al hermano es necesario darlo todo y darlo de corazón, es poco lo que aportamos, pero la gracia de Dios lo vuelve suficiente”, expuso.
Valdez Torres explicó que ese es el camino para la creatividad misionera, pues para la conversión, tanto personal como pastoral, se requiere de generosidad.
“Dar ceder, reconocer, perdonar, volver a confiar, compartir, son manifestaciones de nuestra generosidad fraterna”, indicó.
En ese sentido, explicó que la conversión no es una meta plenamente alcanzada, sino un empeño de toda la vida, sin embargo, este propósito se ve frecuentemente amenazado por las tentaciones.
Por ello, dijo, el cambio de mentalidad consiste en el esfuerzo de asimilar los valores evangélicos que contrasta con las tendencias dominantes en el mundo, por lo que la escucha y el discernimiento son necesarios para la conversión personal y para la acción pastoral.
Explicó que la generosidad conduce a dar y darse, aprendiendo de Jesús e imitando el desprendimiento decidido del muchacho que cedió sus alimentos, para bien de los demás.
“Aprendamos a dar lo mejor de nosotros buscando soluciones, descubriendo en nuestros hermanos lo que pueden aportar para construir el reino de Dios y el bien común, sin quedarnos lamentándonos de la descomposición social y de la problematicidad de hoy”, exhortó.
Empeño por el bien
El jerarca de la Iglesia católica en Ensenada indicó que la vida cristiana exige una determinación firme y perseverante de empeño por el bien, una actitud definida y clara de procurar el bien de todos.
“De nada sirven los lamentos por tantos males, se requiere involucrarnos en las soluciones; ser generoso es dar lo que somos, ser generoso en el servicio da sentido a la propia vida haciendo plena nuestra vocación de hijos de Dios”, concluyó.
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