Un “destape” a la vieja usanza

AGENCIA REFORMA
Ciudad de México

Fiel a sus tradiciones y a la vieja usanza, el PRI destapó este lunes a José Antonio Meade como su candidato a la Presidencia de la República.

Sin ser militante del PRI, Meade no está obligado a presentar los apoyos de los sectores y organizaciones para registrarse como aspirante a la candidatura presidencial.

Sin embargo, integrantes de su equipo aseguraron que se trata de un paso clave para generar identidad entre el priismo y el ex secretario de Hacienda.

Disciplina transexenal
José Antonio Meade no es político, es técnico, dicen.

Sin embargo, es un técnico que ha amparado decisiones políticas de tres sexenios, dos panistas y uno priista, dispuesto a ocupar vacantes cuando los cambios de gabinete lo exigen.

Son varios episodios en la carrera del ahora ex secretario de Hacienda, que lo pintan como un hombre paciente y obediente, un perfil que lo convirtió en el único confiable en el PRI para ocupar la candidatura a la Presidencia.

Uno de los episodios más notorios fue cuando en diciembre de 2009, Agustín Carstens dejó la Secretaría de Hacienda para convertirse en gobernador del Banco de México y todo indicaba que el subsecretario de Hacienda de ese año, José Antonio Meade, sería el elegido.

Tenía una carrera ascendente en el sector hacendario, la cual inició en 1991 cuando entró a la Comisión Nacional de Seguros y Fianzas y luego, en 1997, a la Comisión Nacional de Ahorro para el Retiro.

Durante el sexenio de Vicente Fox estuvo al frente de la transformación del Banco de Crédito Rural en Financiera Rural y luego inició el sexenio de Felipe Calderón, en 2006, como jefe de la Oficina del Secretario de Hacienda para después ascender a subsecretario de Ingresos y subsecretario del ramo.

Pero en la estrategia política, el currículum profesional es lo de menos, y Meade no estaba en los planes de Felipe Calderón, quien designó a Ernesto Cordero como secretario de Hacienda.

En enero de 2011 se presentó un sismo en el gabinete calderonista y Meade fue designado como secretario de Energía -para cubrir a Georgina Kessel-, donde estuvo sólo nueve meses y salió en septiembre 2011, cuando por fin, fue nombrado secretario de Hacienda.

En diciembre de 2012, Enrique Peña Nieto nombró a Luis Videgaray Caso como secretario de Hacienda.

Ni Videgaray, quien fue su compañero de carrera en el ITAM, ni Peña Nieto, lo dejaron fuera del gabinete.

Ocupó la Secretaría de Relaciones Exteriores hasta agosto de 2015.

Relevó a Rosario Robles en la Secretaria de Desarrollo Social, puesto en el que estuvo sólo un año, hasta septiembre de 2016.

Con la salida de Videgaray por invitar a México al entonces candidato Donald Trump a México, Meade llegó a Hacienda de donde ahora es el virtual candidato del PRI a la Presidencia.

“Ese (José Antonio Meade) va a tener el apoyo del PRI y también el apoyo del PAN, el secretario de Hacienda actual fue también el secretario de Hacienda con Calderón”, dijo.
Andrés Manuel López Obrador
Dirigente nacional de Morena

“El PRI no entiende que los ciudadanos exigimos un cambio, el Gobierno de Peña Nieto resucita el ritual del tapado y la entronización con el clamor del sistema. Los ciudadanos rechazamos esas prácticas y vamos a expresar nuestro malestar en las urnas”.
Pedro Ferriz de Con
Candidato independiente

“José Antonio técnicamente es impecable, es honrado. Yo creo que el PRI mandó su mejor carta. El tiro está entre Margarita Zavala y José Antonio, porque los dos tienen características similares, son gente honorable y es gente querida y es gente que van a ser competitivos”
Ernesto Cordero
Presidente del Senado

“El dedazo se concreta una vez más (en la figura de Meade) y la gente tendrá que decidir, el próximo año, si quiere más de lo mismo o si quiere un cambio real de régimen”
Beatriz Mojica
Secretaria general del PRD

“(Estoy) encantado que sea Meade porque así me lo voy a joder más fácil”.
Jaime Rodríguez Calderón
Candidato independiente

“Estamos asistiendo a más de lo mismo: el destape vertical, presidencial, el dedo del Presidente sobre quien considera es el mejor candidato, sin consultar a su militancia ni a la ciudadanía. Es lo mismo de siempre”.
Alejandra Barrales
Líder nacional del PRD