Palabrotas

Por Gerardo Sánchez García*

Advertencia: en este artículo se abordará el tema de las palabrotas, por lo que si no está usted dispuesta (o) a exponerse a ese tipo de lenguaje abandone inmediatamente la lectura de este Gatuperio.

Si por curiosidad, morbo o interés cultural decidió conocer las palabrotas que analizaremos, siéntase aliviada (o) ya que los vocablos a revisar no son aquellos que tengan una intención, connotación o interpretación ofensiva, indecente o grosera.

Son voces, cuya sonoridad y significado les da una belleza y categoría más allá de una mera y simple palabra, son grandes por la conjunción de esos dos factores.

Los rigurosos argumentarán que no hay palabrotas, ni palabritas, que en la lingüística y en la práctica todas son democráticamente iguales, útiles y necesarias y que no hay voces de primera o segunda categoría, lo cual es ciertamente falso.

Algunos sonidos y conceptos agradables
Por ejemplo:

iridiscencia, reflejo de colores distintos, generalmente los del arco iris. Es en su sonido mucho más hermoso que su definición en el diccionario.

O nefelibata, persona soñadora que no se apercibe de la realidad. "Eres una nefalibata”, dicho en voz tierna y/o alta, en el tono adecuado puede generar una reacción sorpresiva, un cordial agradecimiento o una sonora cachetada, y va más allá del vulgar, intrascendente y trillado: "soñadora”.

También está preticor, olor que produce la lluvia al caer en suelo seco. ¿Cómo decir eso en forma tan rápida, bella y simple?.

Nostalgia: del griego nostos, regreso; algos, dolor. En sus dos acepciones: pena de verse ausente de la la patria, los deudos o los amigos; tristeza melancólica originada por el recuerdo de una dicha perdida.

¿Quién no ha sido víctima de ese sentimiento?, fácil de escribir y de definir, penoso de sufrir al estar y/o vivir nostálgico, regresando -imaginariamente- a los momentos felices.

Bonhomía: afabilidad, sencillez, bondad y honradez en el carácter y comportamiento. Que mejor cumplido: "se nota su bonhomía”.

Tenemos: resiliencia: capacidad de adaptación de un ser vivo frente a un agente perturbador o un estado o situación adverso.

De ahí deriva resiliente, que practica o ejerce la resiliencia. "Eres una magnífica resiliente”, halaga e intriga más que afirmar: ¡ay caon!, ¿cómo aguantas tantas inches tiznaderas?.

Serendepia, hallazgo afortunado e inesperado que se produce cuando se busca otra cosa distinta. Algunos piensan en chiripazo o de chiripa, más no tiene la misma connotación que serendepia, que si bien implica la participación del azar, establece un trabajo sistemático previo que llevó a un resultado sorpresivo.

Necesario incluir gatuperio: sustantivo, palabra llana de cuatro sílabas. Mezcla de diversas sustancias incoherentes de que resulta un todo desabrido o dañoso. Intriga, enjuague, embrollo.

Hay muchas palabrotas para enamorarse de ellas, escribirlas y pronunciarlas: ¿cuáles son las suyas?…

"Los rigurosos argumentarán que no hay palabrotas, ni palabritas, que en la lingüística y en la práctica todas son democráticamente iguales, útiles y necesarias y que no hay voces de primera o segunda categoría, lo cual es ciertamente falso”.

*Periodista con más de 30 años de trayectoria.