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Ficción Aplicada: el inventor del tiempo

Por medio de analogías el hombre comenzó a estimar periodos de tiempo; pasando desde las constelaciones hasta los números
C&T
viernes, 15 de agosto de 2014 · 20:51

Por: Sergio Montes/COLABORACIÓN
ficcion.aplicada@gmail.com





Una forma en que el conocimiento se explica y se transmite de un ser humano a otro es mediante analogías, es decir, usamos un escenario familiar y asimilado para explicar otro, a veces más complejo, usando un razonamiento que justifica nuestra comparación. 
Un buen ejemplo de esto es hacer una analogía entre la gestión de la economía de un país como si fuera igual que gestionar la economía de una familia. Si una familia reduce sus ingresos tiene que hacer ciertos sacrificios y privarse de ciertas comodidades para poder seguir adelante. Mediante esta falacia es que  algunos gobiernos justifican el recorte en servicios públicos.
Pero hacer analogías no es sinónimo de hacer mal las cosas, hacer analogías y encontrar patrones en la naturaleza ha servido como una estrategia de supervivencia en muchas ocasiones, y esa práctica también nos ha servido para explicar el funcionamiento de nuestro entorno.
Hace unos 5 mil años por la zona que hoy es Irán e Irak, el hombre empezó a observar con más detenimiento el cielo, se dio cuenta que la medición del tiempo era más compleja que solo identificar el día más largo o el más corto del año.Pudo establecer una división del año en 12 periodos, y para marcarlos buscó en el cielo de la noche algunos patrones entre las estrellas que pudieran tener una analogía con esa división de periodos.
Así encontró que para el periodo del año donde habían más lluvias podía identificar un conjunto de estrellas en el cielo (una constelación) y hacer una analogía de esa figura como si fuera un hombre que riega agua con un cántaro.
Surgió la constelación de acuario; para la época en que se podían cosechar las siembras una constelación asociada a la forma de una espiga de trigo, y ahora tenemos la constelación de virgo.
También es cierto que hubo un abuso de la imaginación y del uso de las analogías, se pensó que las personas que nacían en ciertos periodos tenían una fuerte relación o influencia con la constelación que se observaba en ese momento. De ahí salieron los signos zodiacales, los horóscopos y toda una tradición de predecir eventos a partir del movimiento de las estrellas y planetas.
 

Los números en la medición del tiempo
Igualmente hubo otra forma de medir los periodos de tiempo con una herramienta que apareció más o menos por la misma época: los números. Se descubrió que un ciclo completo era de aproximadamente 365 días, algo muy cercano que multiplicar 30 por 12. 
El número 12 tenía unas propiedades muy interesantes: se puede dividir entre 2, 3, 4 y 6 para obtener un número entero; mientras que el 10 solo se puede dividir entre 2 y 5. El día se podía dividir en dos periodos: el día y la noche, y cada uno de estos en otros 12 periodos: las horas. Por lo que tenemos un día completo como el transcurso de 12 horas de luz solar y 12 horas de oscuridad nocturna.
También encontraron que el número 60 tenía varios divisores, y que a su vez era un divisor del número 360. 
Usar números para representar periodos de tiempo era muy provechoso, daba mucho juego y después se podría extender a otras aplicaciones útiles. Por ejemplo en el intercambio de bienes, una buena medida podía ser el número 12 como un conjunto estándar de objetos, medida que hoy en día seguimos usando para la típica docena de huevos.
Los grandes maestros de las matemáticas de Mesoamérica, los mayas, encontraron en el número 20 su referencia como medida, al igual que los pueblos del centro de Europa, tal vez por eso todavía en el idioma francés para designar al número 80 se dice 4 veces 20.
 

¿Y para nosotros, cuál es la medida? 
Nuestro paradigma es algo tan simple como usar el 0 y 1, y mediante estos dos numeritos podemos crear analogías complejas que nuestros antepasados no se podían imaginar. Creamos entornos virtuales, almacenamos información y generamos conocimiento: nuestra era es la era de usar esos dos dígitos, la era digital. Esta es nuestra revolución,
¿Y de la medida del tiempo? Ya hemos visto que el hombre ha reinventado la concepción del tiempo, ahora sabemos que el tiempo no es una dimensión rígida, sino que se puede estirar o acortar; que existe una frontera imposible de cruzar: viajar a través del tiempo en diferente dirección o velocidad. Pero, ¿realmente eso es imposible? Esta pregunta es el tema de reflexión.



Recomendación
Serie: "El túnel del tiempo”, (años 60´s)
Míralo en:
 

Para los que se pregunten el por qué de esta recomendación, es por dos razones. La primera es que esta serie se ideó para hacerle la competencia a la serie de "Start Trek”, que se transmitía al mismo tiempo en otra cadena de televisión.
La otra es un tema más personal, la primera vez que esta serie se emitió en México, las computadoras eran artilugios que solo aparecían en televisión o películas. El autor de este artículo cuando era muy niño, vio esta serie, y la aplicación que le daban a las computadoras en el centro de control del túnel del tiempo; se imaginó a sí mismo que de grande él sabría cómo funcionan esos aparatos y que les daría un uso fantástico… Y así fue.

*El autor es matemático. Reside en Madrid, España.


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