EL SOPOR DEL BUITRE

Platos rotos

Por Gerardo Sánchez García*
viernes, 25 de mayo de 2018 · 00:00

La Sindicatura Municipal confirmó lo que ya se había publicado con anterioridad en este diario: un faltante de 2 millones 630 mil 139 pesos por los cobros que debió realizar la Unidad Municipal del Transporte (UMT) a los concesionarios del transporte público en este puerto.

Dicha cifra representa el daño patrimonial que sufrió el Ayuntamiento de Ensenada por los pagos no realizados en la expedición del tarjetón de choferes y tarjetón de los vehículos durante los años 2012, 2013, 2014, 2015 y 2016.

Los transportistas están obligados a pagar lo no cubierto en todos esos años y la Sindicatura está obligada legal -y moralmente-, a sancionar a quién o quiénes resulten responsables de no haber efectuado los cobros.

Ante la escasez de recursos que argumenta diariamente el gobierno municipal no puede dejar pasar la oportunidad de recuperar 2.6 milloncitos de tal vez muy devaluados, pero todavía útiles pesitos.

Secretario mentirosillo
El pasado martes Gerardo Sosa Olachea, secretario de Seguridad Pública del Estado, se negó a dar una entrevista argumentando que se lo prohibía la veda electoral.

Dicho argumento resulta falso pues dicha prohibición no se aplica para que los funcionarios den o brinden información, sino para evitar que se hagan promoción.

Sin embargo, al día siguiente -miércoles- la vocería de SSPE publicó el comunicado COMTJ-394, en el cual se informó de la reunión del titular de dicha secretaría con líderes tijuanenses de lo que se denomina “colonias prioritarias” -¿habrá colonias y/o ciudadanos que no sean prioritarios?-, y se difundió el mensaje de Sosa Olachea a los colonos e incluso una foto del sonriente funcionario y los vecinos.

Ambos hechos dan dos posibilidades: a) A Don Tocayo le da por decir mentirillas o b) la veda electoral sólo se aplica los días martes y es exclusiva para negarse a atender a los reporteros.

Ruffo, treinta años después
El pasado lunes Ernesto Ruffo Appel, senador por Baja California, denunció ante el Grupo Madrugadores de Ensenada, la corrupción que prevalece en el sistema político mexicano y particularmente en el Poder Legislativo, entre senadores y diputados federales.

La reacción a sus declaraciones publicadas en este diario, llamaron la atención en dos sentidos.

Fue la nota más comentada y en todos esos comentarios el ex-gobernador fue duramente criticado en cuanto a su calidad moral para hacer ese tipo de señalamientos.

El otro dato importante: nadie salió a su defensa. Ante los duros señalamientos de los internautas sólo respondió el silencio de ruffistas, panistas, funcionarios y ex-funcionarios, ni siquiera los escasos rufomaniacos que aún sobreviven dijeron algo en su favor.

Pobrecita la transparencia
Ayer el Instituto de Transparencia, Acceso a la Información Pública y Protección de los Datos Personales dio a conocer una muy alegre y a la vez muy triste noticia.

¡Por fin!, dos partidos políticos, PES y Movimiento Ciudadano (na, na, na, naaaa), cumplieron al cien por ciento con sus obligaciones de transparencia en sus respectivos portales digitales.

Son las dos primeras organizaciones partidistas de Baja California que cumplen con lo que es su obligación, lo cual es motivo de alegría, aunque resulta lamentable el tener que festejar que las instituciones partidistas por fin cumplan -con meses de retraso y a la fuerza- con la Ley de Transparencia.

Los otros partidos todavía no han cumplido, pero cuando lo hagan posiblemente el Itaipbc hasta mande hacer un mole y traer unos mariachis pa´ festejar.

Enemigo público de México
En Ciudad Juárez, Chihuahua, un negocio dedicado a la fabricación y venta de piñatas acaba de crear una con la imagen de quien es en estos momentos el enemigo público número uno de México.

No se trata de algún capo criminal, gobernante, ni tampoco de algún candidato (a) de los participantes en la actual campaña, no. Es la simbólica representación de Luisito Rey, padre de Luis Miguel, quien gracias a la serie biográfica del cantante se ha convertido en el personaje más odiado de ciertos sectores del país.

Sin embargo, lo que llama la atención es el singular eslogan de venta: “Comprarla para pegarle cuesta 500 pesos. El placer de destruirla, no tiene precio”.

Si usted lectora o lector pudiera elegir al personaje a representar en una piñata, ¿a quién elegiría?

*El autor es atlantista

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