Desairados

En la inauguración del nuevo edificio que albergará los juzgados civiles y familiares en este puerto hubo muchos desairados, entre ellos el alcalde Gilberto Hirata Chico, quien a pesar de ser el anfitrión no pudo decir ni pío, además de que los presidentes de los colegios de abogados, incluidos el "favorito” de la magistrada Esther Rentería, no tuvieron sitio ni mención especial.

Otro que estuvo en el evento sin pena ni gloria, fue el subsecretario de Gobierno del Estado, Pablo Alejo López Núñez, a quien, para variar, se le vio muy alejado (y no por el apellido) del gobernador, lo cual no es extraño pues en los pasillos se cuenta que no es santo de su devoción.

Los que no se arriesgaron a los desaires fueron los integrantes del Colegio de Abogados Independientes y de Opinión Libre, y según lo difundido en su propia cuenta de Facebook, "por acuerdo de la mesa directiva decidimos no asistir a dicho evento por cuestiones ya conocidas por todos ustedes, como son el retraso de más de 2 años de dicho edificio”.

Y agrega: "y la no todavía apertura del Juzgado Segundo de lo Familiar, la cual será hasta el mes de agosto de este año, y la nula respuesta de nuestras peticiones tanto a la presidenta del Tribunal Superior de Justicia, y así también de la Comisión de Hacienda del Congreso del Estado de Baja California, donde solicitamos que nos informen en qué se invirtieron los recurso destinados al Poder Judicial de los años anteriores. Y hasta la fecha no hemos recibido ningún tipo de información tanto del Poder Judicial y Legislativo sobre la rendición de cuentas del Poder Judicial”.

Hace unas semanas publicamos en este espacio que al comité directivo municipal del PAN los estaba asesorando su peor enemigo, porque sus estrategias para cuestionar las acciones del gobierno municipal de extracción priista se le podrían revertir.

Ahora el PAN porteño dio a conocer "la boleta de Hirata”, a través de la cual los panistas y ciudadanos que lo deseen, podrán calificar y evaluar la gestión como alcalde del profesor Gilberto Hirata Chico.

A través de un comunicado, el PAN señala que "el objetivo final es que La boleta de Hirata sirva para que exijamos al presidente municipal y a su gobierno que haga bien su trabajo y cumpla con los ensenadenses y de no hacerlo cabalmente, en castigo en su incumplimiento votemos en contra de su partido en las elecciones de 2015 y 2016”.

Sin embargo, el buen juez por su casa comienza, y no sería mala idea que esta misma boleta se la aplicarán a los regidores panistas que integran el actual Cabildo de Ensenada, así como al propio gobernador Francisco Vega de Lamadrid y todos los funcionarios estatales adscritos en Ensenada, sin olvidarse de los 25 diputados locales. 

El PAN debe recordar que en Baja California dejó de ser partido de oposición desde hace 25 años, y que aquí en Ensenada -con todo y Pelayo- han perdido las tres últimas elecciones.

Lo que el PAN no se atreve a preguntarle a los ciudadanos de este municipio es por qué dejaron de votar por ellos. Hace 13 años los ensenadenses prefirieron a Jorge Catalán Sosa como alcalde, y el profesor Hirata quedó en segundo lugar, a escasos 689 votos de Catalán.

Con un palmo de narices quedaron los sedicentes líderes, principalmente indígenas, que dicen apoyar -desde su muy particular punto de vista y conveniencia- a quien consideran el más idóneo para ocupar la delegación municipal de San Quintín, Enrique Alatorre Navarrete, siendo que ellos son de la delegación municipal Vicente Guerrero.

El fiasco fue por la cancelación, a última hora, de la sesión de cabildo que se efectuaría en esta jurisdicción ayer al medio día, en la que estaría presente el alcalde Gilberto Antonio Hirata Chico. En este marco los supuestos apoyadores de Alatorre Navarrete aprovecharían para patentizar su respaldo al secretario local de la Confederación Obrera Revolucionaria (COR).

Estos supuestos dirigentes, Bonifacio Cruz Martínez y Juan López Hernández, este último aspirante a suceder a Rocío González Salazar en la representación municipal de Vicente Guerrero, no ocultan su deseo de obtener algunos beneficios apoyados por la aspiración de Enrique Alatorre, quien por su falta de colmillo político se ha dejado.