LA BUFADORA

Por: El Mosquito 

 

 

Esta será una semana difícil en Palacio Municipal. Empezando con el posible retorno de José de la Luz Valdez López, quien en términos legales no puede ser acusado de nada, pero que en términos políticos su retorno podría ser usado provechosamente por los detractores del alcalde Gilberto Hirata Chico.

Asimismo, en el controversial tema de la gasera de El Zorrillo se espera que se solicite la destitución de por lo menos dos de tres directores municipales involucrados en el asunto.

También se pronostica que tendrá que resolverse y definirse la legalidad de las operaciones de dicha planta.

En una decisión singular el Comité Ejecutivo Nacional del PRI ordenó que no sólo los candidatos (as) propietarios (as) y suplentes se hagan exámenes psicométricos, antidoping y presenten sus declaraciones patrimonial, fiscal y de intereses, sino que también lo hagan los presidentes estatal y municipales.

La medida es buena y ojalá que la sigan los candidatos y directivos de otros partidos políticos. (¿Cuántos de ellos aprobarían dichas pruebas?)

En los ecos de la breve visita de Enrique Peña Nieto a San Felipe, todavía causa envidia, y una que otra patada política en la espinilla, el hecho de que los más cercanos al presidente de la república hayan sido dos delegados federales de origen ensenadense, Alfonso Blancafort Camarena y Alejandro Arregui Ibarra, de la Semarnat e Infonavit, respectivamente.

Ojalá que ambos dos, junto con Marco Antonio Bolaños Cacho, delegado de la Sedesol y otro de los integrantes de la comitiva que recibió y despidió al mandatario, le ayuden al gobernador Francisco Vega para que Peña Nieto le conceda una cita a "Kiko” y no tenga que solicitársela en actos públicos.

Por lo menos que dichos funcionarios se conduelan y que le pasen el teléfono del secretario particular de Peña Nieto para que la reunión entre ambos gobernantes, federal y estatal, se realice antes de que acabe cualquiera de los dos sexenios.

Por cierto, durante su meteórica visita a San Felipe, el presidente Peña Nieto no dedicó ni una palabra de su discurso al conflicto de los jornaleros agrícolas de San Quintín. Vino a lo que vino, que era el mítico asunto de la vaquita marina, que dicen que todavía existe, aunque en las últimas cuatro décadas los pescadores e investigadores del alto golfo no han avistado ninguna. En este tema llama la atención el singular silencio de los especialistas de la Universidad Autónoma de Baja California, porque ellos sí saben la verdad pero no la quieren o no los dejan expresarla.

Lo que sí es muy evidente es que nuestros vecinos del norte, Estados Unidos, aplaudieron la medida de convertir el Mar de Cortés o Golfo de California en una pecera, donde sólo se pueda practicar la pesca deportiva por parte de turistas norteamericanos, además de los desarrollos hoteleros y recreativos que se proyectan para la costa del golfo.

Cuando Alejandro González Alcocer fue designado como gobernador interino de Baja California (1998-2001), tras el fallecimiento de don Héctor Terán Terán, una de sus primera declaraciones aludió al cajón de jubilaciones de la administración estatal, pues desde entonces se advertía que si no se hacía algo, al paso de los años no habría dinero para pagar las pensiones mensuales a los trabajadores que cumplieran su ciclo laboral.

Hoy la mayoría de los ayuntamientos de la entidad enfrentan millonarios adeudos con el Issstecali, y sin éxito han pretendido saldar dicha deuda con parte de su reserva territorial.

En el caso de Ensenada, desde el trienio de Jorge Antonio Catalán Sosa (qepd), la deuda con el Issstecali no se ha podido liquidar, y sigue creciendo.

 

Cuando Vicente Fox era mandatario del país, se decía que el verdadero poder tras la silla presidencial lo ejercía su esposa, Martha Sahagún. Guardadas las proporciones, en las dos últimas administraciones municipales de Ensenada, también se comenta con fuerza que quienes en realidad toman las decisiones son otras personas, en el caso de Enrique Pelayo Torres se señalaba a Sonia Blancket López, y ahora con Gilberto Hirata Chico se apunta a Samuel Albestrain.

Y que conste que tales aseveraciones emanan de las paredes, pisos, techos y ventanas del palacio municipal.