LA BUFADORA

 

Durante miércoles y jueves se realizó en Ensenada la Segunda Reunión Nacional de Presidentas (sic) Estatales del DIF.

Estas actividades se realizaron a puerta cerrada y con fuertes medidas de seguridad, a grado tal que muchos funcionarios estatales y ningún periodista local que no formara parte del exclusivo grupo de invitadas no pudieron conocer directamente los trabajos de esa convención.

Sin embargo, deben de haber sido muy importantes y extenuantes, al grado tal que el grupo de damas realizaron visitas relajantes a los lugares más exclusivos del Valle de Guadalupe, para liberar el cansancio.

¿Qué se concluyó en la reunión? Así dio a conocer el boletín de prensa los resultados de los trabajos ahí realizados: "temas de gran relevancia referentes al desarrollo de esquemas y reglamentos que tienen que ver con mayores beneficios para niñas, niños, adolecentes (escrito así en el comunicado) y en general a lo relacionado con las familias, fueron abordados durante los dos días de duración de este importante encuentro de alcance nacional”.

Los resultados de la reunión fueron genéricos y magros -al menos los conocidos públicamente-, pero por lo menos la actividad turística ensenadense si se vio beneficiada.

Continúa la comedia de enredos con el Cicese, ahora en la representatividad del doctor Luis Eduardo Calderón Aguilera, quien no cesa de ofrecer espectáculos a nivel de "doctorado”. 

Resulta que con el programa amarrado, teniendo al escritor y periodista Rael Salvador como presentador y coordinador de preguntas y respuestas en la conferencia de Lydia Cacho, "Mujeres Reinventado el Poder” (que se ofrecerá hoy por la tarde en el Cearte), el académico prefirió autoerigirse él como presentador y anular a Rael, argumentando que él no puso 50 mil grandes (lo que cuesta la venida de la Cacho), y "debido a que sr Rael no tiene nada que ver ni en Cearte ni en Cicese, no podrá tener uso de voz”. Y, como si fuera un invitado de lo más incómodo, totalmente ajeno al medio de la comunicación y del mundo de la dignidad, sólo "se le permitirá el acceso a la rueda de prensa”. ¡Así, textual! (este mosquito, vivo y punzante, cuenta con los programas y con los correos del excluyente doctor, y de ahí sustrae los entrecomillados). 

En primer lugar: ¡Aaaah, qué nivel de cooperación! Lo que no parece darse cuenta Calderón, y que no lo entendería, es que la comunidad científica, después de los zopilotazos que le dejaron caer a Denise Dresser, reclamándole los 100 mil pesos que cobró en plena presentación (testimonio que da cuenta Rael Salvador en su columna del 30 de agosto de 2013), perdió piso y ahora el que paga los platos rotos es Rael, quien tiene un vínculo laboral con el ICBC, de más de 25 años, presentando a los escritores e intelectuales del país y el extranjero… Y si no lo recuerdan, pues que se los manden pedir por escrito a Paco Ignacio Taibo II, a Juan Gelman, a José Agustín, a Fabio Morábito y un interminable etcétera, que incluye entrevistas a Jaime Sabines, Heinz Dieterich, Carlos Fuentes o Eduardo Galeano. En este mismo instante puede Calderón echarse una vuelta a la Sala Ernesto Muñoz Acosta y constatar sus colaboraciones directas con el Cearte, aprender un poco de pintura, comprar un libro de Lydia Cacho y bajarle un poco a la soberbia administrativa, que es muy mala consejera y peor madrina. ¡Aaaah, qué nivel de doctorado! 

Parece que está de moda que los funcionarios de primer nivel formen sus equipos de comunicación (por no decir operadores políticos u orejas) paralelos a las áreas de difusión oficiales, y esta vez no lo decimos por el gobierno del Gilberto Hirata Chico, ni por el secretario del Ayuntamiento, Jesús Jaime González Agúndez, sino por el responsable de la comunicación del gobierno estatal, Roberto Karlo López, a quien señalan de meter a una amiga suya en la delegación de Ensenada; y lo que ha dado pie a las especulaciones es que la nueva empleada tiene un salario por encima de quienes llevan años en ese departamento.

Que conste que este comentario no pretende defender o destacar el funcionamiento del área a cargo de Brenda Morales, sin embargo, siempre genera reacciones en el resto del personal cuando perciben que algún funcionario favorece a los suyos.