“Está cerrada la vía armada”: Salmerón

Benjamín Pacheco/EL VIGÍA
bpacheco@elvigia.net

| Ensenada, B. C.

El historiador Pedro Salmerón señaló que “está cerrada la vía armada”, es decir, la forma violenta con la cual el pueblo se ha hecho del poder en México, por lo que el gran desafío intelectual es hacerlo de manera pacífica.

Lo remarcó durante la presentación de su libro “1915. México en guerra”, realizada el sábado pasado en el puerto de Ensenada, cuando también rechazó que para cambiar el régimen actual se tenga que recurrir a la guerrilla, el golpe militar o la insurrección.

“Estoy absolutamente convencido de que tenemos un enorme desafío intelectual: ¿Cómo hacemos esa revolución de manera pacífica? Hasta ahora lo hemos hecho de manera violenta.

“Estoy convencido de que las formas violentas mediante las cuales el pueblo -en este país o en otros- tomó el poder ya no funcionan, están cerradas. La vía armada ya no es vía, tiene un tapón”, según respondió Salmerón ante el cuestionamiento de que si había las condiciones para una nueva revolución.

Inviable la violencia
Sobre la victoria de una guerrilla, el escritor explicó que es en un país mayoritariamente rural, que permite en zonas aisladas construir el poder popular, controlar el campo e ir cercando las ciudades.

“Esas condiciones no existen en México. Somos un país casi 80 por ciento urbano, un país donde casi no hay regiones absolutamente agrestes salvo de manera marginal.

“En este momento la tecnología del espionaje impide la construcción de un núcleo guerrillero que no se sepa donde está, que se esconda. Y los medios de teletransportación (del griego tele, lejos) son tales que quirúrgicamente van y los destruyen antes de que acumulen fuerzas”, puntualizó.

De la segunda forma, tendría que provenir de un sector nacionalista del Ejército, como los casos de Panamá, Portugal, Grecia y Egipto.

“Si eso va a pasar, no es cosa de nosotros, es cosa de los milicos (sic.) No se ven desde antes, se ven cuando dan el golpe”, aclaró.

Y de la insurrección, como ocurrió con los bolcheviques en 1917 (antigua Unión Soviética) o los obregonistas en 1920, ya tendría que tener el poder en sus manos el grupo que buscaría rebelarse.

“Controla las fábricas, los ranchos y haciendas, las universidades, los barrios. Ya es el poder real. Son los que toman las decisiones reales. Ya sólo es darle un (golpazo) al régimen para que se caiga. Cuando construyamos eso, ya no necesitaremos hacer una revolución, compañeros.

“No existe ahora. Eso es mucho más difícil y tardado que construir lo que estamos planteando, que es rebasar ampliamente con las votaciones a la derecha y construir una estructura capaz de defender el voto, porque este país no es democrático hay que defender el voto”, enfatizó Salmerón.