DE NIÑOS Y OTROS ENREDOS
Propósito de nuevo año
Por Dr. Enrique Sicardi Aragón*
Como siempre y para no perder la costumbre, iniciando un nuevo año con nuevos propósitos. El simple hecho de ponernos metas o hacer planes y proyectos, eso por sí mismo es bueno, ya que nos da entusiasmo y este es un buen impulso para poder alcanzar los objetivos propuestos.
Mis propósitos son fáciles de lograr, ya que, a mis casi 66 años, creo que lo único que pudiera truncarlos sería una muerte intempestiva, y en verdad, eso, por mi parte no lo decreto. En relación a una muerte de proceso patológico, ahí sí que por el grupo de edad en el que me ubico puedo ser víctima de ello, por lo tanto, hay que ponernos trabajar a fin de que eso no sea un factor que afecte mis metas a alcanzar.
Si estoy bien, todo lo que venga es posible, así que mi principal objetivo es mantener lo mejor posible mi salud y para ello hay que retomar el ejercicio en forma seria y comprometida. Nada mejor que reintegrarme a lo que Héctor Zepeda Gutiérrez y un servidor iniciamos el 4 de agosto de 2002, ya casi 17 años, lo que se ha posicionado como la Caminata Tradicional del Cañón de Doña Petra a San Antonio de las Minas, el primer domingo de cada mes, tan sólo 22 km de bello, intenso y purificador senderismo. Ya inicié mis preparativos de acondicionamiento físico a fin de evitar tropiezos o limitantes a este firme propósito. Este domingo 6 de enero será la primera caminata del año, espero MUCHOS MÁS SE SUMEN Y NOS PUEDAN ACOMPAÑAR.
El ejercicio físico e intenso tomado en entornos de libertad, tanto en tiempo como en espacio, nos impulsa a expandir a su máxima capacidad nuestra caja torácica e inhalamos un aire limpio, fresco, lo que impele al corazón a bombear con mayor energía, aumentando los volúmenes de sangre súper oxigenada que requieren todos nuestros sistemas y órganos, beneficiando inicialmente a su propia circulación coronaria y nutriendo a sus propias células miocárdicas, tornándolas más fuertes y trabajando para hacer llegar el preciado torrente circulatorio al total de las células que integran nuestro maravilloso cuerpo humano. A esa microcirculación, aquellos recónditos lugares de esos pequeñísimos vasos capilares donde radica el sustrato de nuestra funcionalidad, se ven favorecidos del ejercicio físico al aire libre. Al final de cuentas todo es mejorar la circulación, ya que, al haber mejor flujo, mayor nutrición, mejor depuración y, por ende, mejor salud.
A nivel cerebral, al mejorarle la circulación, nuestros pensamientos fluyen con mayor rapidez, encontramos más y mejores opciones de solución y resolvemos nuestro diario acontecer, nos preparamos para lo que pueda venir, nos llena de ánimo, enfrentando la vida con amor y proyectando fortaleza y energía.
El cuidar al santuario que alberga nuestra alma, espíritu, mente o como queramos llamarle, el ser respetuosos con él, es el punto donde radica el inicio de todos los demás propósitos; sin un cuerpo sano, difícilmente habrá una mente sana, con una maquinaria perfectamente funcional, las metas a alcanzar son más viables.
Todo lo anterior requiere trabajar en armonía con una alimentación adecuada, completa, suficiente, pura y lo más natural posible. Sí, mis amigos, esta dina de buena nutrición y sano ejercicio son esenciales a fin de alcanzar las otras metas establecidas.
Así que, a iniciar un nuevo ciclo más lleno de oportunidades, las cuales hay que enfrentarlas entusiastas y trabajándolas con pasión con lo que lograremos su realización. El trabajo confrontado de esta forma logrará sortear los obstáculos encontrados en el camino.
Todos los propósitos y proyectos, su principal impulsor o limitante es nuestra propia mente y, si los llevamos a cuestas sobre un cuerpo sano y armonioso, el trabajo por venir es fácil y no habrá obstáculo que nos lo impida.
Así que, mis queridos amigos, los esperamos este domingo 6 de enero, si son muy valientes desde antes de las seis de la mañana o tradicionalmente a las siete, al final de la avenida Ruiz en donde inicia el cañón de Doña Petra y con punto final en San Antonio de las Minas.
Iniciemos de esta forma nuestra corta o larga lista de buenos propósitos 2019.
*El autor es médico pediatra
sicardi53@gmail.com
Mis propósitos son fáciles de lograr, ya que, a mis casi 66 años, creo que lo único que pudiera truncarlos sería una muerte intempestiva, y en verdad, eso, por mi parte no lo decreto. En relación a una muerte de proceso patológico, ahí sí que por el grupo de edad en el que me ubico puedo ser víctima de ello, por lo tanto, hay que ponernos trabajar a fin de que eso no sea un factor que afecte mis metas a alcanzar.
Si estoy bien, todo lo que venga es posible, así que mi principal objetivo es mantener lo mejor posible mi salud y para ello hay que retomar el ejercicio en forma seria y comprometida. Nada mejor que reintegrarme a lo que Héctor Zepeda Gutiérrez y un servidor iniciamos el 4 de agosto de 2002, ya casi 17 años, lo que se ha posicionado como la Caminata Tradicional del Cañón de Doña Petra a San Antonio de las Minas, el primer domingo de cada mes, tan sólo 22 km de bello, intenso y purificador senderismo. Ya inicié mis preparativos de acondicionamiento físico a fin de evitar tropiezos o limitantes a este firme propósito. Este domingo 6 de enero será la primera caminata del año, espero MUCHOS MÁS SE SUMEN Y NOS PUEDAN ACOMPAÑAR.
El ejercicio físico e intenso tomado en entornos de libertad, tanto en tiempo como en espacio, nos impulsa a expandir a su máxima capacidad nuestra caja torácica e inhalamos un aire limpio, fresco, lo que impele al corazón a bombear con mayor energía, aumentando los volúmenes de sangre súper oxigenada que requieren todos nuestros sistemas y órganos, beneficiando inicialmente a su propia circulación coronaria y nutriendo a sus propias células miocárdicas, tornándolas más fuertes y trabajando para hacer llegar el preciado torrente circulatorio al total de las células que integran nuestro maravilloso cuerpo humano. A esa microcirculación, aquellos recónditos lugares de esos pequeñísimos vasos capilares donde radica el sustrato de nuestra funcionalidad, se ven favorecidos del ejercicio físico al aire libre. Al final de cuentas todo es mejorar la circulación, ya que, al haber mejor flujo, mayor nutrición, mejor depuración y, por ende, mejor salud.
A nivel cerebral, al mejorarle la circulación, nuestros pensamientos fluyen con mayor rapidez, encontramos más y mejores opciones de solución y resolvemos nuestro diario acontecer, nos preparamos para lo que pueda venir, nos llena de ánimo, enfrentando la vida con amor y proyectando fortaleza y energía.
El cuidar al santuario que alberga nuestra alma, espíritu, mente o como queramos llamarle, el ser respetuosos con él, es el punto donde radica el inicio de todos los demás propósitos; sin un cuerpo sano, difícilmente habrá una mente sana, con una maquinaria perfectamente funcional, las metas a alcanzar son más viables.
Todo lo anterior requiere trabajar en armonía con una alimentación adecuada, completa, suficiente, pura y lo más natural posible. Sí, mis amigos, esta dina de buena nutrición y sano ejercicio son esenciales a fin de alcanzar las otras metas establecidas.
Así que, a iniciar un nuevo ciclo más lleno de oportunidades, las cuales hay que enfrentarlas entusiastas y trabajándolas con pasión con lo que lograremos su realización. El trabajo confrontado de esta forma logrará sortear los obstáculos encontrados en el camino.
Todos los propósitos y proyectos, su principal impulsor o limitante es nuestra propia mente y, si los llevamos a cuestas sobre un cuerpo sano y armonioso, el trabajo por venir es fácil y no habrá obstáculo que nos lo impida.
Así que, mis queridos amigos, los esperamos este domingo 6 de enero, si son muy valientes desde antes de las seis de la mañana o tradicionalmente a las siete, al final de la avenida Ruiz en donde inicia el cañón de Doña Petra y con punto final en San Antonio de las Minas.
Iniciemos de esta forma nuestra corta o larga lista de buenos propósitos 2019.
*El autor es médico pediatra
sicardi53@gmail.com
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