LUCES DE LA BAHÍA

La apología del crimen

Por: Juan Zamora Hernández
sábado, 23 de noviembre de 2019 · 00:00

Definitivamente los abrazos en lugar de los balazos ha sido un fracaso, pues en lugar de haber disminuido, su incremento ha sido constante en toda la república, tal parece que los criminales se sienten protegidos por las autoridades, porque no han pensado que esas frases no son de alabanza ni mucho menos es una apología como ellos creen, es sólo una frase para reconciliar a los mexicanos y evitar que la desunión que ahora existe, pueda desaparecer.

Pero de que ha aumentado el delito criminal, existe y creo sin equivocarme que ya es hora que el gobierno tome más en serio y ahora sí, se dedique a combatir la criminalidad para protección de la ciudadanía y se pueda vivir en paz.

No más abrazos, no más muertes de elementos de nuestro, ejército ni de policías, fúchila, guácala, mucho menos de gente pacífica, hay que aplicar lo dicho por la biblia, “diente por diente” y a ver si así se calman y entonces sí, hay que darles sus abrazos.

Pero ya que hayan recapacitado, que el haber tratado de perdonarlos por su fechorías no era para que ellos siguieran cometiendo sus desmadres, asesinando a seres inocentes como sucedió con la familia LeBarón, donde masacraron a mujeres y niños, fúchila.

Ya que vamos hasta ahorita muy bien, pues hay que corregir el rumbo y tomar el de la justicia, darles oportunidad a las Fuerzas Armadas, Guardia Nacional y Policía de que se defiendan y evitar que sigan con la ola de crímenes, robos, secuestros, etc.,

Pues se ha dado el caso que hasta menores de edad, con trece años o mas ya se están convirtiendo en secuestradores y ¿esto por qué sucede? Sencillamente, porque ven que las autoridades no les hacen nada y que los malhechores se hacen ricos quitándoles su patrimonio a familias, que dejan todas desequilibradas por la angustia de ver que su familiar está desaparecido o muerto.

Esto en verdad no es justo, porque de verdad urge la intervención de todos los mandos encargados de vigilar el orden y comportamiento que los ciudadanos deben de cumplir, enseñarles a los malandrines, que el que cometa un delito lo tiene que pagar, pero no con unas horas cárcel, usando la puerta giratoria que los jueces utilizan tanto, sino con toda la energía de la que tienen derecho las autoridades para ejércela.

Ya Basta de actuar con tanta benevolencia, si los criminales no se tientan el corazón para matar, mujeres, niños y civiles en general, porque nosotros si les debemos dar abrazos y no corresponder con la misma forma que ellos actúan, creo que sería lo más adecuado, y así parar a estos seres, que son bestias salvajes que hay que quitar de nuestra sociedad. Y con esto me despido y hasta la próxima. D.M.
 

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