Se fue un grande

El ex guardameta Pablo Larios Iwasaki, falleció en el hospital debido a un paro respiratorio por problemas intestinales.

La comunidad futbolera está de luto, el ex guardameta Pablo Larios Iwasaki, falleció a la edad de 58 años, debido a un paro respiratorio que derivó de problemas intestinales, lamentablemente murió en cirugía.

No cabe duda que, Pablo Larios, será recordado en la historia del futbol mexicano debido a sus grandes actuaciones al momento de atajar los disparos contrarios y sus salidas de alta calidad en el aire.

El ex guardameta jugó para el club Atlético Zacatepec, en el que debutó en 1980, también estuvo con el club cementero, Cruz Azul, en el que consiguió dos subcampeonatos, con el club camotero, Puebla, se coronó como campeón de Liga en la campaña 1989-1990, incluso en el mismo año alzó el torneo de Copa con el club de la Franja; en 1986 fue portero mundialista de la Selección Mexicana de Futbol, llegando a los cuartos de final ante la República Federal de Alemania, quien nos eliminaría desde los 11 pasos. En 1997 se unió al equipo, Toros Neza, en el cual obtuvo otro subcampeonato y en 1998 se retiraría de las canchas.

Desgraciadamente no todo es color de rosas en la historia de Larios, pues tuvo muchos problemas extra cancha.

Primero la muerte de su hijo, Pablo Larios Garza, que fue encontrado en el Río Bravo mientras se dirigía a visitar a su novia en los Estados Unidos. Antes de lo mencionado sufrió el secuestro de una de sus hijas, Paola Larios; también sufrió la muerte de su madre, padre y su hermana.

Todo esto desencadenó que el ex guardameta se dirigiera al camino de las drogas para ocultar su inmensa depresión, en especial la cocaína, el consumo excesivo de la misma derivó en que contrajera un virus que le deformó el rostro, tuvo que ser sometido a alrededor de 20 operaciones.

Varias personas y clubes del Futbol Mexicano lamentaron el fallecimiento del ex portero, sin embargo, hubo una persona en especial en pronunciarse, “el ex portero de los Pumas de la UNAM, Jorge Campos: “Se fue el mejor de todos los tiempos aunque le pese a muchos, sobre todo a los que no conocen el arco. Siempre le estaré agradecido por lo que me enseñó. Gracias a él la gente se acuerda mucho de mí. Creo que fui su obra maestra, por todo lo que me entrenó. Gracias ídolo”.

Pablo Larios Iwasaki es un claro ejemplo de lo que es la fama, el dinero y las drogas, que lamentablemente a veces van de la mano de muchos deportistas, no sólo en el futbol, en todos los deportes, donde hemos sido testigos de grandes adicciones que han destrozado familias, carreras, entre otras cosas, incluso muchos han acabado en muy mal estado, como el jugador Paraguayo, ex americanista, Salvador Cabañas, quien perdió absolutamente todo, incluyendo a su familia, en especial sus hijos; algunos han llegado hasta la cárcel y desgraciadamente otros a la muerte.