Energizando a Baja California

Las condiciones naturales, geográficas y sociales de baja california, nos apuntalan como una entidad del país, que pudiera posicionarse como líder en la producción de energías renovables, punta de lanza para proyectos del más alto nivel en términos de generación de empleos, empresas y divisas.

La polémica Reforma Energética de 2013, en su momento, generó un verdadero cisma político – legislativo que exhibió en aquel momento, los graves claroscuros de las empresas del Estado Mexicano como Pemex, destinadas a la independencia energética de nuestra nación, fue una lucha férrea para llegar a un punto que pudo encontrar resultados que hoy son reales y tangibles.

Me refiero por ejemplo a temas como que que al día de hoy, ya es una constante en la nacional el acceso a los reportes trimestrales de producción petrolera, reportes financieros de las empresas productivas del Estado, hasta estar al pendiente de nuestros recibos de energía eléctrica.

Estamos acostumbrados ya a alternar el consumo eléctrico comercial o residencial hacia los famosos “paneles solares, revisar diario los precios de combustibles, o incluso, elegir entre marcas distintas de gasolineras atendiendo al famoso “litro de litro” o “mejor rendimiento”; en fin, los resultados positivos han sido tangibles, medibles y son exigibles por cualquier mexicano.

Y hay que decirlo, hoy en Baja California, tenemos que entender las grandes áreas de oportunidad que el tema de la energía representa para todo ciudadano, de éste estado, y es que nuestra ubicación geográfica privilegiada, y las condiciones naturales de todo el Estado, abren un abanico de posibilidades que bien aprovechadas, significarán no nada más independencia energética para nuestra entidad, sino importante generación de empleos, divisas y la apertura a capitales muy importantes nacionales y extranjeros para inversiones sin precedentes para Baja California.

Hablando de nuestra ubicación geográfica privilegiada, tenemos que subrayar dos temas muy claros, somos vecinos de la 5ta potencia económica a nivel mundial, me refiero al Estado de California, con quien tenemos el potencial de crecer en inversiones, proyectos, y acciones de gran calado y largo aliento, al tener y ejercer la visión de desarrollo correcta, en donde la generación y distribución de energía, podría jugar un papel preponderante para todo tipo de emprendimientos, desde muy pequeños, hasta proyectos de gran envergadura.

Además, nuestra ubicación geográfica, nos posiciona, y en específico a Ensenada, como la puerta a la Cuenca del Pacífico, vamos y valiéndome de la redundancia, somos esa puerta de entrada y salida al mundo de las importaciones y exportaciones con Asia, en donde los múltiples mercados nos presentan con amplísimas oportunidades de proyectos e inversiones nunca antes vistas, de contar con la infraestructura adecuada, hablando de comunicaciones (puertos adecuados, carreteras, aeropuerto), y por supuesto, para esto, la independencia energética, es pieza fundamental.

Por otro lado, es imperativo recordar que las condiciones naturales de Baja California son insuperables para la producción energética.

Me explico, tenemos más de mil kilómetros de litoral por el Pacífico y el Golfo de Baja California, en donde pueden desarrollarse grandes proyectos de generación de energía a través del Mar.

Me refiero a energía que se obtiene aprovechando las mareas (mareomotriz), de las corrientes marinas; de las olas (undimotriz); de la diferencia de temperatura entre la superficie y las aguas profundas del océano (energía maremotérmica o termomarina) o, incluso, la que puede generar la diferencia de salinidad entre el agua de mar y la de río (energía azul o potencia osmótica).

Redundando nuevamente, tenemos un mar de posibilidades, si nos sumamos todos en un proyecto de Estado de largo aliento, que de manera sostenida y sustentable, represente grandes beneficios para toda nuestra entidad.

No solo eso, tenemos la gran capacidad en Baja California de generar, de producir energía eólica y solar en diversos puntos de la entidad, que concatenados, unos con otros, podrían representar una política de estado para el impulso al desarrollo económico de una manera ambientalmente responsable, socialmente sustantiva, de beneficios para todos los sectores.

Ésta política energética de Estado a la que todos debemos sumarnos, permitirá la visión a proyectos que impulsen el desarrollo sostenido para los próximos 30, 50 y 70 años, estableciéndonos como ese brazo fuerte nacional, punta de lanza en acciones contundentes para el bienestar general de nuestra entidad y nuestro país.

*Contador público, consultor de empresas, emprendedor y presidente de Consulten

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