EL SOPOR DEL BUITRE

Nosotros los pobres

Por: Gerardo Sánchez García*
viernes, 12 de noviembre de 2021 · 01:16

Al estilo Chucho el Roto -o Chucho el Remendado en la versión de Tin Tan-, el Cabildo de Ensenada pretende arrebatarle su opulencia a los ricos del municipio para entregársela a los pobres.

Inflamados de un afán de justicia social, trece de los quince ediles, repitieron -como si estuvieran en la ONU-, -pausa para un acorde melodramático-: ¡primero los pobres!

La conmovedora escena y propuesta justiciera por supuesto que generó la indignación de -ustedes- los ricos y clasemedieros aspiracionistas de este municipio inconformes con un doble aumento al Impuesto Predial del que hasta el momento ninguno de sus promotores -y quienes votaron a favor- no han explicado con claridad cómo se aplicará.

Tampoco hay una explicación lógica y justificada de la razón de qué negocios como bares, restaurantes, hoteles, subagencias y otros giros se les pretende aplicar aumentos que van desde un veinte hasta un 300 por ciento.

Otro asunto que no queda claro es el por qué el alcalde Armando Ayala Robles, la Síndico Procuradora, Elizabeth Muñoz Huerta, y el regidor Christian Dunn Fitch -quienes formaban parte del anterior ayuntamiento-, no defendieron con el mismo celo y furor al noble y pobre pueblo ensenadense en el pasado ejercicio fiscal 2021.

¿Ignoraban que había ricos y pobres en esta municipalidad?, ¿acaso -tal vez- por ser año electoral?, ¿o por el hecho de que se contaba con el apoyo de Dady Bonilla?

La indignación por estos posibles aumentos se ha manifestado profusa y duramente en las redes sociales, expresión de un pueblo bueno y no tan sabio, pues no entiende que si paga más ,además de cubrir la excesiva nómina municipal, tiene la promesa y muy remota oportunidad de tener mejores servicios públicos y más programas sociales.

¿Además dónde quedaron las promesas de que no habría aumentos de impuestos por parte de Morena?

El Cabildo ensenadense -o quienes votaron a favor de dicha iniciativa- están corriendo un doble riesgo, enfrentarse al rechazo de estos aumentos y a la posibilidad de que el Congreso del Estado también los rechace y enmiende la propuesta, ya que los legisladores no traen en la sangre ese espíritu justiciero de Chucho el Remendado y considerarán más los efectos políticos.

Estupidez monumental
La Auditoría Superior de la Federación podría enfrentar un grave problema jurídico, fiscal, administrativo y enigmático de suspenderse las obras que por 35.8 millones de pesos se pretenden realizar en Playa Hermosa.

De acuerdo al alcalde Armando Ayala Robles los responsables de que pudiera perderse esas obras y recurso son “intereses mezquinos y revanchismos de seudoecologistas”.

¿Dónde encontrarlos?, ¿cómo identificarles y dictarles una orden de aprehensión o exigirles la reparación del daño?

¿Es usted Don Interés Mezquino?, preguntarán los auditores federales a quien se les cruce en su paso por las calles ensenadenses.

Ello por supuesto en el impensable caso de que algún funcionario municipal o federal pudiera tener alguna responsabilidad en esta trágica comedia de equivocaciones que han sido las obras de Playa Hermosa.

Decimos que eso es muy improbable porque ningún funcionario en su sano juicio y después de haber jurado cumplir y hacer cumplir la ley se atrevería a violar la normatividad ambiental costera, no una sino tres veces consecutivamente y en la misma zona.

¿Quién es responsable de esta serie de errores y fallas gubernamentales? Nadie, el gobierno municipal culpa a los seudoecologistas y al excesivo burocratismo y valemadrismo de la Profepa y la Semarnat.

Está por supuesto la siempre válida y útil teoría de la conspiración, que se basa en el principio de que si algo sale mal culpa a otros y si además esos otros forman parte de un imaginario compló en tu contra mucho mejor.

Ojalá -por el bien de Ensenada- que esas obras no se pierdan y se realicen en estricto apego a la normatividad, pero es deseable que alguien asuma culpas y responsabilidades, así como sus respectivos costos políticos y personales.

Hacer estupideces en forma constante con dinero propio no es delito, hacerlo con recursos públicos debe sancionarse legal, administrativa y políticamente.

FRASE
“Mi lealtad es con el presidente López Obrador. Mi amor para Carla Humprey”.

(Santiago Nieto, ex titular de la UIF y líder moral de cualquier cabrón que esté enamorado)
 

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