Asesinan a niños

Hace 23 años, cuando en el poblado de El Sauzal de Rodríguez se registró la masacre en el rancho El Rodeo, donde 19 personas, entre ellas mujeres y niños, incluso un bebé, quienes integraban tres familias pertenecientes a una etnia nativa de Baja California, fueron asesinadas por un comando del narcotráfico, cuya misión era ejecutar a Fermín Castro y todos sus parientes.

Y a partir de entonces la delincuencia organizada rompió la regla no escrita de respetar la vida de los menores de edad y las mujeres, porque en la actualidad las páginas y secciones de noticias policiacas en los medios informativos destacan la muerte de infantes en el fuego cruzado o por ataques directos.

El caso más reciente es el que se registró el viernes pasado en la ciudad de Tijuana, donde una pareja y sus tres hijos pequeños -de 3, 5 y 10 años- fueron acribillados en el interior de su casa.

¿Qué castigo merecen los autores intelectuales y materiales de este monstruoso homicidio?; ¿por qué ningún representante de agrupaciones civiles, académicas o empresariales se pronuncia al respecto, o alza la voz para exigir justicia?, ¿cuál es la razón de que los diputados o regidores no se pronuncien y ocupen por estos hechos?; ¿acaso no hay interés del gobierno y la población por detener esta escalada de violencia?

Al respecto, Luis Carlos Ugalde, ex presidente del Instituto Federal Electoral (IFE) hoy INE, sostiene que el principal riesgo de la democracia mexicana es la participación activa, no pasiva, del crimen organizado en los procesos electorales.

“Ese tema puede afectar y destruir las bases en muy poco tiempo. Creo que ese es tema que vale la pena reflexionar para ver cómo se puede prevenir”, alertó.

El también director de Integralia Consultores presentó el libro: “Elecciones, justicia y democracia en México. Fortalezas y debilidades del sistema electoral 1990-2020”, editada por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.

Al respecto, apostó a que pueda ser un buen insumo y consulta de legisladores y actores políticos para tener datos y análisis que puedan contribuir a un debate y propuestas informadas y con diagnóstico ante una eventual reforma electoral constitucional, de la cual, dijo, se sabe poco.

Sólo lo dicho por el presidente que ha mencionado temas como la modificación de las instituciones electorales, sin saber exactamente qué significa, así como la desaparición de diputados plurinominales y bajar el costo de la democracia que no es necesariamente malo, apuntó Ugalde.

Para el ex presidente del IFE, es necesario que una eventual reforma inicie de diagnósticos y de un análisis de qué funciona y qué no, y no se parta de “estigmas, mitos y creencias ni de un creacionismo” que lleva a invalidar todo lo hecho y conseguido antes de 2018.

De no evaluarse lo que funciona, alertó, se puede estar ante cambios que impliquen una vuelta en u, o un torbellino del cual no queda claro qué puede ocurrir.

Pero lo que sí es un hecho, es que de nada servirá tener un sistema electoral ejemplar de continuar la escalada de asesinato y la descomposición social.