Quien es Estela Parrilla Echeverría

Con Estela llegamos a Baja California en el verano de 1969, me acompañó al Observatorio Astronómico Nacional (en construcción). Llegamos con dos de nuestros hijos pequeños, el tercero nació pocos meses después en Ciudad de México.
Se tituló como maestra de Primaria. Tenía gran experiencia en formación y educación de niños y jóvenes; era magnífica lobatera de la Manada Kahnihuara de los Scouts de México. Organizó exitosamente un Campamento Nacional de Seiseneros en el Centro Oaxtepec IMSS- Morelos, además de otras actividades con lobatos de México y alrededores.
Estela nació en Ciudad de México el 10 de agosto de 1941. Su papá industrial Álvaro Parrilla y su mamá María de Jesús Echeverría. La familia eran cuatro hermanas y dos hermanos unidos todos por un gran cariño.  Entonces vivían en CDMX, ahora están en varias ciudades. 
En 1968, con la intención de formar a sus hijos y dar oportunidad a otros niños, organiza con las profesoras Aurora de Rico y Danae González la Escuela Primaria y Jardín de Niños TLAMACAZQUI, donde se aplican las técnicas FREINET, técnicas “activas, modernas, motivadoras” para educar a niños y jóvenes para su vida futura. Se le conoce como la “Escuela Nueva Tlamacazqui” (vocablo Nahuatl “Caracol grande”), significa “sacerdote” (que da, comunica: conocimiento, sabiduría).
Con la escuela, organiza “Viajes de Ballena” en la Bahía Ensenada, que continúan como actividad de la ciudad. También visitan el Observatorio Astronómico Nacional en San Pedro Mártir. Viajaron a Mexicali para ver que la Geotermia, es fuente de energía; hubo “Talleres de Verano” en el Museo y otras actividades. 
Tanto Estela, como los científicos que la apoyaban, continuaron con la idea del MUSEO DE CIENCIAS, para aprovechar su experiencia y comunicar la ciencia, la técnica y su importancia a la comunidad de la ciudad.
En 1988, nació el Museo de Ciencias de Ensenada en Obregón 1463, casi con calle 14. Instalaron la bien conocida y aceptada exposición “¿Caerán del arca?”, la “Vaquita Marina, especie en peligro de extinción”; también un reloj geológico para conocer la edad geológica de la formación y evolución de las especies en la Tierra. 
La casa adaptada tuvo varias salas, además del arca. Física en el “garaje”, matemáticas, un pasillo geológico, un pequeño acuario, atendido por alumnos de ciencias marinas que apoyaban al museo, casi todos voluntarios; una maqueta de la Bahía de Ensenada quedó en un salón con un gran ventanal orientado a la bahía; las “Barbas de Ballena” y “Caracoles Gigantes”, un espectáculo para los visitantes.
El museo permaneció aquí por tres años. El Municipio pagó la renta del local. Al terminar el contrato y desalojar la casa, el proyecto tuvo que esperar. Para entonces, se había integrado el Patronato de CARACOL que permitió continuar con su construcción. Se logró con el apoyo de Museotec, dedicados a la formación y construcción de varios museos instalados en ciudades de México y otros países.
Continuamos con la construcción de Museo Caracol, Centro Científico y Cultural, A.C. Finalmente en el 2015 se abrieron las actuales instalaciones ya bajo el nombre actual. El Museo ofrece proyecciones astronómicas en un Domo Planetario y audiovisuales en el Auditorio. Posee talleres didácticos con temática ambiental y astronómica, además de 3 salas permanentes: Sala de la Tierra, Sala del Cielo (ambas ya en operación) y Sala del Mar y Acuario el cual se abrirá pronto.

*Astrofísico jubilado/IA-UNAM